Oración y Devoción:
Encender una vela es un acto de oración, una ofrenda votiva o un símbolo de recuerdo a un ser querido.
Luz y Presencia Divina:
La llama de la vela se asocia con la luz de Cristo, iluminando el espacio sagrado y simbolizando la presencia de Dios o la esperanza.
Atmósfera Espiritual:
Las velas contribuyen a crear un ambiente de recogimiento y serenidad propicio para la reflexión y la devoción.
Continuidad y Tradición:
El uso de velas en la iglesia mantiene viva una tradición milenaria, conectando a los fieles con generaciones pasadas.
Registro Nacional de Propiedad Intelectual
Confeccionado en Madera Noble de Raulí, por artesanos de la comuna de Recoleta